24 Nov Diferencia entre carilla, corona e incrustación
Tanto la incrustación como la corona dental forman parte de la lista de tratamientos que se recomiendan en la odontología conservadora.
El objetivo de ambos tratamientos es recuperar la estética y la funcionalidad de los dientes.
Sin embargo, para hacer una elección adecuada de un tratamiento u otro, existen diferencias que se deben tener en cuenta para hacer una elección adecuada.
En este artículo, vamos a explicar que son las carillas, coronas e incrustaciones dentales para entender en qué casos se aplican y en qué se diferencian.
¿Qué son las carillas dentales?
Las carillas dentales son unas finas láminas que se colocan en la cara frontal de los dientes.
Su objetivo no es el de mejorar la funcionalidad de las piezas dentales, sino darles un aspecto más armónico y bonito. Son piezas que se crean a medida del paciente con el fin de que se obtenga la mayor naturalidad posible al ser colocadas junto al resto de dientes.
Las carillas dentales, por tanto, se utilizan para corregir defectos como: dientes torcidos, rotos, separados, con manchas, irregulares o desgastados.
¿Qué es una incrustación dental?
Una incrustación dental es una restauración parcial que se utiliza para rehabilitar piezas, generalmente muelas, cuando han sufrido una pérdida moderada de su estructura dentaria.
Se colocan generalmente en la parte posterior de la boca, sustituyendo la estructura dental que se ha perdido.
Las incrustaciones dentales se cementan al diente sustituyendo la estructura dental que se ha perdido por caries o diferentes fracturas o desgastes. Estas se realizan en un laboratorio, con moldes de la boca del paciente, para su posterior cementación en el diente del paciente, ya en la clínica dental.
¿Qué son las coronas dentales?
Las coronas dentales están hechas a medida del paciente. Son como pequeñas fundas con forma de diente que se colocan sobre el diente natural del paciente y lo cubre totalmente imitando a la perfección al resto de dientes naturales.
Son la solución a la pérdida total de un diente, lo que conlleva a la colocación de un implante y posterior corona y el debilitamiento de una pieza dental que está dañada y que necesita la colocación de una corona para protegerla.
Estas se adhieren al diente con una resina o cemento que se aplica en el interior de la corona dental y se une al diente.
¿Qué diferencias se encuentran entre ellas?
Las incrustaciones y las coronas dentales son tratamientos de restauración. Lo que determina si colocar un tratamiento u otro es el grado de deterioro del diente dañado.
Ambos tratamientos se engloban dentro de la especialidad odontología conservadora, a diferencia de las carillas dentales que se englobarían dentro de la odontología de estética dental.
Las coronas dentales se recomiendan cuando los dientes están afectados por caries, fracturados, a la hora de realizar un implante también se coloca una corona, en dientes desvitalizados, para restaurar un diente que está muy desgastado y para realizar rehabilitaciones completas.
Con las carillas dentales se mejora la estética del paciente dándole una mejor morfología del diente y un color adecuado. Se diferencian de las coronas en que no es necesario realizar el tallado de toda la circunferencia del diente y permite la preservación de la estructura dental sana. Con las incrustaciones se disminuye el riesgo a la fractura que existe en dientes únicamente reconstruidos, así como también se disminuye el desgaste.
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